Argumento:
La búsqueda del documentalista Michael Moore por probar la culpabilidad de la administración Bush en los sucesos del 11 de Septiembre de 2001
Comentario
Generalmente el cine político pasa de moda muy rápido. Lo mismo que las personas o entidades aludidas en dicho género. Costa-Gavras, uno de los exponentes clásicos del tema, ha trascendido, por tocar tópicos más amplios y darle una pizca de entertainment que se agradece. Einsenstein y Riefenstahl, leyendas de la vieja escuela, más que nada aportaron a la propaganda, y otros como Ken Loach, Jim Sheridan y Spike Lee han logrado en general buenos trabajos, incluso indiscutidos resultados notables (“Tierra y Libertad”, “Mi Pie Izquierdo”, “Haz lo Correcto”, respectivamente), pero en la materia que nos compete, no están entre los primeros lugares.
Desde Estados Unidos, uno de los países escogidos como blanco de ataque por parte de muchos (no sólo cinematográficamente hablando), surgió a fines de los ochenta la gruesa figura de Michael Moore, quien se ha tomado muy en serio su labor de vocero de
“Fahrenheit 9/11” es un alegato desvergonzadamente parcial sobre la caída de las Torres Gemelas, sin olvidar sindicar, de paso, a George Bush como el responsable casi absoluto de esta tragedia, y los errores que lo llevaron a ello, además de recordarnos la polémica elección que ¿ganó? el 2000.
Las imágenes desgarradoras sobran: la patriota madre que perdió a su regalón en la guerra, los muchachos sin mucho cerebro ni formación militar (para muchos, exactamente lo mismo) que pelean con rabia, el reclutamiento de jóvenes, literalmente, en plena calle, y la posterior visita de Moore (actor principal de sus documentales) al congreso para que los senadores inscribieran voluntariamente a sus hijos, con divertidas consecuencias.
Pero además, inserta repetidamente graciosas caricaturas de los sucesos y los personajes, con guiño a la serie “Bonanza” incluido, y una irónica voz en off, cuyo momento de perfección lo alcanza la lectura de cuentos de Bush a unos niños en Florida mientras le informan la catástrofe que ocurre en Nueva York en esos momentos, y como mención honrosa la entrevista a Britney Spears.
A pesar de esta ametralladora de pruebas contra el gobierno de aquellos años, no se puede pasar por alto los bajones de ritmo que en una cinta un poco demasiado larga, de dos horas de duración, se aguantan a medias, y termina apestando un poco (sólo un poco, hay que decirlo), el hecho de tanta imparcialidad, que nunca termina jugando a favor del fiscal que Moore quiere ser. No le pido mentiras, solo cierto equilibrio en lo que a la temática se refiere, que en “Bowling…” se esparcía armoniosamente, quizá porque la búsqueda de culpables era menos abierta que acá.
A pesar de estas cosas, “Fahrenheit 9/11” es un imprescindible de la primera década del siglo.
Ficha Técnica
Título Original: "Fahrenheit 9/11"
Director: Michael Moore
Guión: Michael Moore
Música: Jeff Gibbs
Línea Memorable
"En el momento que ocurrió el ataque, el Señor Bush iba en camino a una escuela básica en Florida. Cuando fue informado del ataque del primer avión chocando con el World Trade Center, donde los terroristas intentaron atacar ocho años antes, el Señor Bush decidió seguir adelante con su oportunidad de fotografías. Cuando el segundo avión chocó la torre, el jefe de su grupo entró al salón y le dijo al Señor Bush que la nación estaba bajo ataque. Nadie sabía que hacer, nadie le dijo a él que hacer, ningún miembro del servicio secreto se apuró en llevarlo a un lugar seguro. El Señor Bush siguió allí, sentado, y continuó leyendo 'Mi Mascota, la Cabra' con los niños. Cerca de siete minutos más pasaron, antes que se hiciera recién algo."
Recomendado para:
Anti-Bush´s people.
Botón de Muestra
http://www.youtube.com/watch?v=RnvZqW53kT4